hace diez días a estas horas acababa de llegar a brujas, que me recibía con un aguacero que no tenía nada que envidiar a los de mi querida tierra. afortunadamente para mí sólo duró unas horas y el resto de mi estancia no dejó de brillar el sol. hoy ya he aterrizado del todo: primer día de trabajo, donde me he encontrado las cosas prácticamente como las dejé.
mis días en bélgica han sido muy felices. la diferencia de edad con chris apenas se notaba porque tenemos muchas cosas en común, tanto en aficiones como en mentalidad. ha sido una anfitriona inigualable, me ha enseñado su ciudad y su país como la mejor de las guías, y su marido franz nos ha deleitado gastronómicamente, todo un cocinillas!
domingo 13: primer reencuentro!
llegué a madrid a las nueve de la noche. en chamartín me recibió río y tras tomar un refresco en el bar de su barrio (curioso que siendo tan grande madrid en el bar fuera como estar en la plaza del pueblo porque se conocían todos) fuimos a por juanra, que trabajaba hasta las diez. no nos veíamos desde septiembre en el camino, y fue muy emocionante volver a recordar batallitas y ponernos al día. cenamos juntos y ya me fui camino a la terminal 1 de barajas.
nunca había hecho noche en un aeropuerto. me pareció curioso. incapaz de dormirme pasé cuatro horas observando (e inmortalizando) a los de mi alrededor. por cierto que éramos unos cuantos (al menos 40) esperando a los primeros vuelos de la mañana.
a las 4 facturé y de nuevo paseíto por la zona de espera. a las 5.45 embarqué. a las 6.30 despegué. brujas ahí voy!
lunes 14: segundo reencuentro!
a las 8.30 aterricé en bruselas charleroi. té, pasatiempos, libro e información de bruselas, todo ello amenizado con mi ipod para la espera al bus. a las 11.30 me monté en el bus. cuando se puso en marcha me extrañé. en teoría no salía hasta las 12. así que le pregunté al chófer y ... menuda entrada en bélgica! era el bus a bruselas! el chófer tampoco se dio cuenta cuando le di el billete. pues para mi sorpresa dio media vuelta y me dejó a la entrada del aeropuerto, donde previo aviso se detuvo el bus a brujas para recogerme. a medio camino a brujas paramos en un área y me cambiaron a una minivan a mí sola. un poco mosca me quedé, pero no me quedaba otra que confiar. y a las 2 llegábamos a la gare de brujas, donde chris me esperaba con los brazos abiertos. de nuevo bus para ir a saint michel, recibimiento musical por parte de franz (toca el piano), menú de peregrino de bienvenida y siesta merecida. amanecí a media tarde con la luz del sol atravesando la ventana (menos mal, ya pensaba que no dejaría de llover). cenamos según horario europeo y tras un tour turístico en coche para ver la brujas nocturna a las 10 a mimir, que el día siguiente iba a ser intenso.
mis días en bélgica han sido muy felices. la diferencia de edad con chris apenas se notaba porque tenemos muchas cosas en común, tanto en aficiones como en mentalidad. ha sido una anfitriona inigualable, me ha enseñado su ciudad y su país como la mejor de las guías, y su marido franz nos ha deleitado gastronómicamente, todo un cocinillas!
domingo 13: primer reencuentro!
llegué a madrid a las nueve de la noche. en chamartín me recibió río y tras tomar un refresco en el bar de su barrio (curioso que siendo tan grande madrid en el bar fuera como estar en la plaza del pueblo porque se conocían todos) fuimos a por juanra, que trabajaba hasta las diez. no nos veíamos desde septiembre en el camino, y fue muy emocionante volver a recordar batallitas y ponernos al día. cenamos juntos y ya me fui camino a la terminal 1 de barajas.
nunca había hecho noche en un aeropuerto. me pareció curioso. incapaz de dormirme pasé cuatro horas observando (e inmortalizando) a los de mi alrededor. por cierto que éramos unos cuantos (al menos 40) esperando a los primeros vuelos de la mañana.
a las 4 facturé y de nuevo paseíto por la zona de espera. a las 5.45 embarqué. a las 6.30 despegué. brujas ahí voy!
lunes 14: segundo reencuentro!
a las 8.30 aterricé en bruselas charleroi. té, pasatiempos, libro e información de bruselas, todo ello amenizado con mi ipod para la espera al bus. a las 11.30 me monté en el bus. cuando se puso en marcha me extrañé. en teoría no salía hasta las 12. así que le pregunté al chófer y ... menuda entrada en bélgica! era el bus a bruselas! el chófer tampoco se dio cuenta cuando le di el billete. pues para mi sorpresa dio media vuelta y me dejó a la entrada del aeropuerto, donde previo aviso se detuvo el bus a brujas para recogerme. a medio camino a brujas paramos en un área y me cambiaron a una minivan a mí sola. un poco mosca me quedé, pero no me quedaba otra que confiar. y a las 2 llegábamos a la gare de brujas, donde chris me esperaba con los brazos abiertos. de nuevo bus para ir a saint michel, recibimiento musical por parte de franz (toca el piano), menú de peregrino de bienvenida y siesta merecida. amanecí a media tarde con la luz del sol atravesando la ventana (menos mal, ya pensaba que no dejaría de llover). cenamos según horario europeo y tras un tour turístico en coche para ver la brujas nocturna a las 10 a mimir, que el día siguiente iba a ser intenso.
martes 15: brujas
arriba a las 8. desayuno copioso basado en pan y mermeladas caseras (delicioso!), yogur, fruta, infusión, queso, galletas,... para aguantar toda la jornada! a las 9.30 bus al centro. tras coger plano e información en la oficina de turismo para tener para el recuerdo empieza el tour. lo bueno de hacer turismo con alguien del lugar es que te enseña también lo no tan turístico pero no por ello menos impactante.
pasear por brujas supone retroceder en el tiempo: las calles empedradas, los edificios de piedra y madera, las iglesias y catedrales, los jardines, el beaterio, las casas de dios, las plazas, los canales, los carruajes, las bicicletas de paseo, ... tengo unas 150 fotos de brujas y por supuesto no las puedo colgar todas, haré una selección.
comer en la plaza mayor en una terracita bajo el sol primaveral fue la guinda. de postre chocolate belga relleno de naranja, puro vicio. por la tarde, paseo en bici por el bosque de san michiel bajo un cielo azul. cena, infusión y a mimir.
miércoles 16: brujas y flandes occidental
por la mañana brujas en bici para recorrer las afueras, donde las distancias son mayores, y ver las puertas y los molinos de brujas. una cosa que me llamó la atención de mi visita a bélgica es que todos los días, fuéramos a donde fuéramos nos encontrábamos con estudiantes haciendo excursiones.
por la tarde cogimos el cuatro ruedas y recorrimos el noroeste: lissewege, zeebrugge, blankenberge, wenduine, de haan, oostende, middelkerke, westende, nieuwport y leper. emoción en la capilla de san jacobs de nieuwport donde vimos una señal del camino y una estatua de santiago y en leper donde vimos el homenaje a los caídos en la guerra mundial (conocimos a un señor cuyo padre sobrevivió a la guerra...).
jueves 17: gante
versión grande de brujas. igual de encantador con el detalle del tranvía circulando por toda la ciudad. impresionantes casas, enormes canales, varias torres coronando la ciudad,... y un día soleado para disfrutarlo!
anécdota de la mañana, en el cañón margarita un grupo se puso a recitar versos en belga y chris y yo fuimos un público entregado (aunque yo no me enteré de nada) y les aplaudimos al terminar. pues ellos nos grabaron aplaudiendo y a mí me sacaron foto por ser española!
por la tarde me fui sola al bosque y disfrute de una preciosa luz de atardecer y de la madre naturaleza y sus criaturas (patos, cisnes, ardillas,...). segunda anécdota, tenía que haber llegado un matrimonio de artistas (él pintor de renombre) con los que chris y su marido hacen intercambio de casa. pues no llegaron y no avisaron. cuando dimos el asunto por perdido franz y yo dijimos "estos artistas son todos iguales". cómo nos pudimos reir de la situación, aunque en el fondo estuviéramos ofendidos.
viernes 18: bruselas
la mayor decepción del viaje. no puedo decir que la ciudad fuera horrible, pero era ciudad, con el poco encanto de edificios modernos. vamos, que salvo las vistas desde el atomium, lo curioso de minieuropa, la galería (como la de milán), el manneken pis y el grote markt lo demás pues sin más...
muy buen guía, jean pierre, un amigo de chris. probé las típicas frites belgas-francesas según quién lo diga. tres anécdotas: zara está en todas las ciudades belgas importantes, bruselas tiene una estatua dedicada a don quijote y sancho panza y chris y yo emocionadas al ver la concha del camino en la grote markt y como locas buscando el camino por brujas... los chinos nos miraban aturdidos!
sábado 19: à vélo
tras el fracaso de mi intento de coordinar una visita a holanda (otra vez será pedro) decidimos descansar de tren y pasamos el día en la bici. cargadas de provisiones nos pusimos en marcha y recorrimos los canales de brujas hasta llegar a hoeke. a la vuelta parada en damme para comer y pasear por este precioso pueblo a la vera del canal, con su típico molino.
por la tarde paseé sola por las calles de brujas mientras que chris acudía a los preparativos de la procesión de la sangre sagrada. aproveché para las compras de rigor y, como se puso a chispear, por curiosidad entré en zara y acabé con una chaqueta y una camiseta.
domingo 20: amberes
de nuevo al tren. destino amberes, otra bonita ciudad para conocer. otro nuevo amigo que nos hizo de guía, aunque está vez chris tenía que traducir porque dionisio no sabía ni inglés ni castellano ni francés.
la estación de tren colosal (3 pisos de andenes!), el tranvía que da ese toque de antigüedad a la ciudad, la casa de rubens, de nuevo calles empedradas, la catedral, un edificio de 1591, el castillo, el canal, la grote markt,... comimos en un sitio con una decoración que parecía sacada de museo, de postre tocó helado (de rechupete), y la jornada fue amenizada por un ambiente único puesto que fuimos justo el día de la maratón local (una vez al año y tate! a eso se le llama puntería!).
lunes 21: dinant
último día turístico. cambio de aires. destino, sur de bélgica. un pueblo de nuevo a la vera de un canal y a los pies de una montaña que no llegaría a los 200 metros, pero que fue la única que vi en todo el viaje. y en la cima la ciudadela, que visitamos bien sûr!
anécdota: pues que el viaje de 2 horas se convirtió en 3 porque a 20 km de dinant se estropeó el tren. nos dejaron tirados 1 hora en el andén de un pequeño pueblo hasta que trajeron un nuevo tren. comida en terraza con vistas al canal y foto de la casa de adolfo sax, inventor del saxofón!!!
ya de regreso a brujas acompañé a chris a la coral de la parroquia, donde canta con su marido. después cena de despedida y velada con infusión antes de acostarnos. chris me regaló un cuaderno donde ha escrito sus anécdotas de su 2º peregrinaje a santiago. qué detalle!
martes 22: regreso a casa
por la mañana aún pude aprovechar para dar un último paseo por brujas para despedirme. después de comer terminar de recoger las cosas y a la gare. 2 horas de bus al aeropuerto (esta vez sin confusión), 2 horas de espera en la terminal, 2 horas de vuelo en 1ª fila escuchando las anécdotas de los auxiliares de vuelo (me sonreía pensando en las que me había contado tom), metro barajas-estación sur, espera en la estación (la más angustiosa por el ambiente que había), casi 4 horas de bus a zaragoza y en coche a casa. cogí la cama (a las 4 am) con unas ganas! menos mal que al día siguiente no tenía que trabajar...
hasta la próxima!
comer en la plaza mayor en una terracita bajo el sol primaveral fue la guinda. de postre chocolate belga relleno de naranja, puro vicio. por la tarde, paseo en bici por el bosque de san michiel bajo un cielo azul. cena, infusión y a mimir.
miércoles 16: brujas y flandes occidental
por la mañana brujas en bici para recorrer las afueras, donde las distancias son mayores, y ver las puertas y los molinos de brujas. una cosa que me llamó la atención de mi visita a bélgica es que todos los días, fuéramos a donde fuéramos nos encontrábamos con estudiantes haciendo excursiones.
por la tarde cogimos el cuatro ruedas y recorrimos el noroeste: lissewege, zeebrugge, blankenberge, wenduine, de haan, oostende, middelkerke, westende, nieuwport y leper. emoción en la capilla de san jacobs de nieuwport donde vimos una señal del camino y una estatua de santiago y en leper donde vimos el homenaje a los caídos en la guerra mundial (conocimos a un señor cuyo padre sobrevivió a la guerra...).
jueves 17: gante
versión grande de brujas. igual de encantador con el detalle del tranvía circulando por toda la ciudad. impresionantes casas, enormes canales, varias torres coronando la ciudad,... y un día soleado para disfrutarlo!
anécdota de la mañana, en el cañón margarita un grupo se puso a recitar versos en belga y chris y yo fuimos un público entregado (aunque yo no me enteré de nada) y les aplaudimos al terminar. pues ellos nos grabaron aplaudiendo y a mí me sacaron foto por ser española!
por la tarde me fui sola al bosque y disfrute de una preciosa luz de atardecer y de la madre naturaleza y sus criaturas (patos, cisnes, ardillas,...). segunda anécdota, tenía que haber llegado un matrimonio de artistas (él pintor de renombre) con los que chris y su marido hacen intercambio de casa. pues no llegaron y no avisaron. cuando dimos el asunto por perdido franz y yo dijimos "estos artistas son todos iguales". cómo nos pudimos reir de la situación, aunque en el fondo estuviéramos ofendidos.
viernes 18: bruselas
la mayor decepción del viaje. no puedo decir que la ciudad fuera horrible, pero era ciudad, con el poco encanto de edificios modernos. vamos, que salvo las vistas desde el atomium, lo curioso de minieuropa, la galería (como la de milán), el manneken pis y el grote markt lo demás pues sin más...
muy buen guía, jean pierre, un amigo de chris. probé las típicas frites belgas-francesas según quién lo diga. tres anécdotas: zara está en todas las ciudades belgas importantes, bruselas tiene una estatua dedicada a don quijote y sancho panza y chris y yo emocionadas al ver la concha del camino en la grote markt y como locas buscando el camino por brujas... los chinos nos miraban aturdidos!
sábado 19: à vélo
tras el fracaso de mi intento de coordinar una visita a holanda (otra vez será pedro) decidimos descansar de tren y pasamos el día en la bici. cargadas de provisiones nos pusimos en marcha y recorrimos los canales de brujas hasta llegar a hoeke. a la vuelta parada en damme para comer y pasear por este precioso pueblo a la vera del canal, con su típico molino.
por la tarde paseé sola por las calles de brujas mientras que chris acudía a los preparativos de la procesión de la sangre sagrada. aproveché para las compras de rigor y, como se puso a chispear, por curiosidad entré en zara y acabé con una chaqueta y una camiseta.
domingo 20: amberes
de nuevo al tren. destino amberes, otra bonita ciudad para conocer. otro nuevo amigo que nos hizo de guía, aunque está vez chris tenía que traducir porque dionisio no sabía ni inglés ni castellano ni francés.
la estación de tren colosal (3 pisos de andenes!), el tranvía que da ese toque de antigüedad a la ciudad, la casa de rubens, de nuevo calles empedradas, la catedral, un edificio de 1591, el castillo, el canal, la grote markt,... comimos en un sitio con una decoración que parecía sacada de museo, de postre tocó helado (de rechupete), y la jornada fue amenizada por un ambiente único puesto que fuimos justo el día de la maratón local (una vez al año y tate! a eso se le llama puntería!).
lunes 21: dinant
último día turístico. cambio de aires. destino, sur de bélgica. un pueblo de nuevo a la vera de un canal y a los pies de una montaña que no llegaría a los 200 metros, pero que fue la única que vi en todo el viaje. y en la cima la ciudadela, que visitamos bien sûr!
anécdota: pues que el viaje de 2 horas se convirtió en 3 porque a 20 km de dinant se estropeó el tren. nos dejaron tirados 1 hora en el andén de un pequeño pueblo hasta que trajeron un nuevo tren. comida en terraza con vistas al canal y foto de la casa de adolfo sax, inventor del saxofón!!!
ya de regreso a brujas acompañé a chris a la coral de la parroquia, donde canta con su marido. después cena de despedida y velada con infusión antes de acostarnos. chris me regaló un cuaderno donde ha escrito sus anécdotas de su 2º peregrinaje a santiago. qué detalle!
martes 22: regreso a casa
por la mañana aún pude aprovechar para dar un último paseo por brujas para despedirme. después de comer terminar de recoger las cosas y a la gare. 2 horas de bus al aeropuerto (esta vez sin confusión), 2 horas de espera en la terminal, 2 horas de vuelo en 1ª fila escuchando las anécdotas de los auxiliares de vuelo (me sonreía pensando en las que me había contado tom), metro barajas-estación sur, espera en la estación (la más angustiosa por el ambiente que había), casi 4 horas de bus a zaragoza y en coche a casa. cogí la cama (a las 4 am) con unas ganas! menos mal que al día siguiente no tenía que trabajar...
hasta la próxima!
1 comentario:
cierto es... la próxima vez no te escapas de ver las maravillas de delft! por cierto "el país de los canales y las bicicletas" es holanda, que si un holandés lee que dices eso de bélgica y de los belgas se puede sentir ofendido!! eso de "el país del chocolate" va bien, yo diría "el país del chocolate, la cerveza y tintin (el belga mas famoso)"...
me alegra q lo hallas pasado bn. cu & xxx
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